viernes, 3 de mayo de 2013

La Biblioteca Escolar en tiempos difíciles


La Biblioteca Escolar se encuentra inmersa en un proceso de transformación progresivo que no debe detenerse a pesar de los recortes educativos que  ha impuesto la actual situación económica. Así, en las 5ª Jornadas de Bibliotecas Escolares de Cataluña se plantea como propósito alentar a las Administraciones Públicas a seguir apoyando los planes de fomento de la lectura y de uso de la Biblioteca Escolar.

No obstante, es necesario buscar formas de rentabilizar los recursos existentes de manera más eficaz y sin generar gastos. Siguiendo estos principios, recojo aquí la actividad “Brujas contra Monstruos” propuesta por el escritor y narrador Pep Bruno, que está pensada para fomentar la lectura sin gastar dinero y sin que sea precisa la presencia de un encargado de la biblioteca escolar, pues los colegios andan muy justitos de personal. Me parece un magnífico ejemplo de lo que se puede hacer si explotamos un poco nuestra imaginación y creatividad.

Otra forma de seguir dando vida a nuestras bibliotecas es la de compartir lotes de libros, como viene haciendo la Red Profesional de Bibliotecas Escolares de la provincia de Málaga de manera muy bien organizada en la Zona de Recursos, Servicios e Intercambio.

También contamos cada vez más con  la implicación de las familias en el fomento de la lectura que organizan sesiones de cuentacuentos, clubes de lectura e incluso colaboran en tareas bibliotecarias y abren las bibliotecas en horario extraescolar.

Y por supuesto, no hay que olvidar la gran contribución de las redes cooperativas que comparten experiencias y conocimiento para mejorar la gestión y funcionamiento de las bibliotecas escolares. Un ejemplo ilustrativo es la Red de Bibliotecas Escolares de Castilla y León.

Para concluir, tomo prestado el lema del Colegio San Felipe Neri de Cádiz del curso pasado:
 

“Juntos avanzando”

 

miércoles, 1 de mayo de 2013


La biblioteca escolar: un largo camino por recorrer


Es incuestionable la creciente importancia que están tomando las bibliotecas en los centros educativos, pero intuyo que las cosas no se están haciendo del todo bien, pues el aumento de las cifras sobre equipamientos, fondo bibliográfico, horario de apertura, etc. no siempre inciden de manera directamente proporcional en la utilización eficaz de todos estos recursos. Por ejemplo, una biblioteca de 100 metros cuadrados y unos 6.000 volúmenes perfectamente catalogados puede ser en realidad un almacén donde sólo entra el personal de limpieza esporádicamente para quitar el polvo a los libros. Del mismo modo que una pequeña biblioteca de menos de 500 libros puede ser un espacio vivo y útil. En otras palabras: “cantidad no implica calidad”.

Nos preguntamos entonces ¿cuál es la clave del buen funcionamiento de las bibliotecas escolares? La respuesta podría dárnosla todo buen empresario que conozca sobradamente la vital importancia del capital intelectual. Lo más valioso con lo que contamos para gestionar los recursos y alcanzar los objetivos deseados son los trabajadores, las personas que ponen todo su conocimiento y todo su interés en realizar un buen  trabajo.

Son los bibliotecarios escolares los que dan vida a las bibliotecas en colegios e institutos. Son ellos los que contagian el gusto por la lectura, son ellos los que invitan al alumnado a profundizar en los conocimientos que les transmiten sus maestros. Son ellos los que les indicarán el camino hacia el aprendizaje autónomo y alentarán su formación continua.

Sólo si apostamos por ellos lograremos convertir las bibliotecas escolares en verdaderos Centros de Recursos para la Enseñanza y el Aprendizaje (CRA).

En el documento Las bibliotecas escolares funcionan podemos apreciar el papel funadamental del "maestro-bibliotecario" o Coordinador CRA, fundamentado en inmumerables investigaciones que se vienen realizando en Estados Unidos desde los años noventa.